Plan migratorio. La candidata a vicepresidenta en fórmula con Biden promete también concluir el esquema de Tercer País Seguro firmado con Centroamérica.
La fórmula Joe Biden-Kamala Harris anunció que de llegar a la Presidencia de EU pondrá fin a la política migratoria aplicada por Donald Trump, incluido el programa Quédate en México, que obliga a 10 mil paisanos y migrantes centroamericanos a permanecer en el país hasta que Washington resuelva su petición de asilo.
A una semana de las elecciones presidenciales, Harris —quien busca ser la primera vicepresidenta de EU— aseguró que Biden impulsará un sistema de inmigración “justo y humano”, contrario al ejercido por el candidato republicano, que se basa en “demonizar” a los indocumentados para culparlos de los problemas que enfrenta su país. “Joe Biden sabe que la migración es una fuente de fortaleza para el país. Como presidente terminará el trabajo de construir un sistema de inmigración justo y humano; la administración Biden-Harris protegerá nuestra frontera, mientras que asegura la dignidad de los migrantes y defiende su derecho legal a buscar asilo, incluido el fin del programa Quédate en México”. Sostuvo que se eliminarán también los acuerdos de “tercer país seguro” firmados con El Salvador, Honduras y Guatemala, que obligan a esas naciones a detener las olas migratorias que se dirigen a EU a cambio de ayuda económica. En mayo pasado, Trump presionó a México para que adoptará esa misma política y para ello amagó con imponer aranceles de 5 por ciento a las exportaciones nacionales hacia ese país.
En respuesta, el presidente Andrés Manuel López Obrador envió una carta al mandatario estadunidense en la que propuso profundizar en el diálogo y buscar alternativas de fondo al tema. Tras semanas de negociaciones, el canciller Marcelo Ebrard logró frenar la aplicación de aranceles, pero México se comprometió a aplicar medidas para frenar la ola de migración, incluido el despliegue de la Guardia Nacional en la frontera sur. En tanto, la fórmula Biden-Harris dijo ayer que ya en el gobierno se harán cumplir las leyes de EU, pero sin ir contra las comunidades, sin violar su derecho al debido proceso o separar a las familias. «Trump ha usado a los inmigrantes como chivo expiatorio y los ha demonizado, separando a los padres de sus hijos, malgastando los recursos de los contribuyentes en soluciones ineficaces e inhumanas, dando la espalda al sueño americano. Y acabamos de descubrir, a través de reportes (de prensa), que 545 niños todavía están separados de sus padres debido a la cruel política de tolerancia cero de su administración. Es una atrocidad».