Daniela Álvarez, presidenta del Comité Directivo Estatal del PAN, dio a conocer que de las dirigencias municipales del partido que renovarán sus cargos, sólo Camargo presentó ciertas asperezas entre los dos candidatos a presidente local: Gerardo Uribe y Gerardo Rentería. Sin embargo, las diferencias -indicó- fueron dirimidas gracias al diálogo franco entre ambos militantes.

Tales declaraciones surgen luego de que, el pasado 20 de septiembre, tras realizarse la Asamblea Municipal donde se elegiría a una de las dos planillas participantes en la contienda, el candidato Gerardo Uribe advirtió presuntas irregularidades al momento de contabilizar los votos, pues en un principio se contabilizaron 307 votos, aun cuando sólo se tiene registro de 287 militantes.

A su vez, denunció la supuesta desaparición de boletas y la falta de certeza sobre las cartas de no adeudo de los miembros de la otra planilla, requisito establecido en la convocatoria del PAN.

Esta situación, indicó Álvarez, generó incertidumbre entre los militantes del propio partido blanquiazul, ya que existía la posibilidad de que el quejoso impugnara los resultados, lo cual (dijo), retrasaría la aprobación de las dirigencias municipales en el Comité Ejecutivo Nacional.

Al mismo tiempo, la dirigente hizo un llamado a cerrar filas tanto a los militantes de Camargo como a los de otros municipios, pues este próximo domingo se realizará la entrega de las constancias a cada presidente electo y su equipo de trabajo en los Comités Municipales.

Cabe resaltar que el día de ayer, Daniela Álvarez encabezó una rueda de prensa donde agradeció la madurez política de ambos contendientes camarguenses, y donde subrayó que Gerardo Rentería fue reconocido como presidente electo del Comité Directivo Municipal del PAN en Camargo, mientras que Gerardo Uribe manifestó su disposición para sumarse a los trabajos de la nueva dirigencia.

En su intervención, Gerardo Rentería hizo un llamado a dejar atrás las diferencias y trabajar en conjunto. Aseguró que su gestión buscará consolidar un partido cercano a la gente, en coordinación con gobiernos y legisladores de Acción Nacional.