Tres mil 773 personas que no han sido reclamadas por algún familiar se encuentran en la fosa común, en el panteón San Rafael, donde autoridades municipales colocaron un arreglo floral y se dio la bendición por parte del sacerdote Armando Benavides.

“Es parte que depende cien por ciento de Fiscalía General del Estado; ellos tienen sus procedimientos. A nosotros, ya cuando están listos para inhumar, nos llega un oficio a la Dirección General, nos hacen el favor de turnarlo y preparamos la cantidad de fosas que requieran; normalmente son de dos a tres servicios por año”, informó Gibrán Solís, director de Limpia del Municipio.

“Ahorita andamos arribita de las tres mil 700 personas inhumadas en la fosa común”, agregó el funcionario municipal, luego de que fue colocada una ofrenda floral.

La ofrenda floral fue por parte del presidente municipal Cruz Pérez Cuéllar, quien estuvo acompañado de funcionarios de diferentes dependencias, y la oración fue dirigida por el sacerdote Armando Benavides.

“Te pedimos ahora, Señor, que este cementerio, este lugar destinado a la inhumación de los cuerpos colocados bajo la sombra protectora de la cruz se convierta, por el poder de tu bendición, en un lugar de descanso y esperanza”, expresó el sacerdote.“Que aquí descansen en paz los cuerpos de los difuntos hasta que ellos resuciten inmortales en la gloriosa venida de tu hijo; que aquí el pensamiento de los vivos se eleve a la esperanza de lo eterno, que desde aquí suban las oraciones de tus fieles como sufragio para los que duermen en Cristo”, añadió.

Destacó el sacerdote que estos cuerpos inhumados se encuentran en calidad de desconocidos, pero ante los ojos de Dios sabe quiénes son, y la ofrenda es para ellos, que descansan ahí.