Ciudad de México- El pasado 9 de septiembre las instalaciones de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) fue lugar de la misteriosa muerte del científico Alfredo Torres Larios, cuyo cuerpo fue encontrado en una cámara de hielo seco ubicada en los laboratorios de la institución.
De acuerdo con la carpeta de investigación de la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México, el cadáver no mostraba señas de violencia, y, según familiares y amigos, Torres Larios no tenía enemigos.
El cuerpo del científico fue descubierto por sus compañeros quienes solicitaron una ambulancia e intentaron reanimarlo sin éxito, posteriormente, los paramédicos confirmaron el deceso del profesor quien ya presentaba congelamiento en el rostro.
Hasta el momento se desconocen las causas del incidente, sin embargo, elementos de la Policía de Investigación (PDI) y peritos especializados de la fiscalía sospechan que pudo tratarse de un descuido por parte del profesor, el cual pudo haber provocado que el hombre quedará atrapado dentro de la cámara.https://d-40564671594080951138.ampproject.net/2109032350000/frame.html
Por el momento, la Fiscalía de Justicia se encuentra a la espera de los resultados de la necropsia del cuerpo de Torres Larios, y de las pruebas recabadas en la escena.
Por su parte, el Instituto de Fisiología Celular de la UNAM manifestó su pesar a través de sus redes sociales, y mandó condolencias a sus familiares, colegas y amigos.
“Con enorme tristeza informamos el fallecimiento del Dr. Alfredo Torres Larios, investigador destacado de este Instituto. Nuestro más sentido pésame a sus familia, colegas y amigos. Descanse en paz.”, difundió la máxima casa de estudios.https://d-40564671594080951138.ampproject.net/2109032350000/frame.html
Sus estudiantes también acudieron a las redes sociales para dar su último adiós y agradecimiento a su profesor.
Alfredo Torres Larios, de 49 años, era un galardonado científico que contaba con un doctorado en Biología Estructural y Maestría en Ciencias Bioquímicas e Ingeniería Bioquímica, por lo que era investigador titular B, SNI nivel II. Asimismo, recibió diversos premios y distinciones a nivel internacional.